El hábitat del quetzal es el sur de México, Guatemala, Honduras, el Salvador…es el ave de las tierras mayas.
Algo mágico es estar caminando entre ruinas mayas y ver los destellos coloridos de esta ave mítica.
En los viajes a México de los circuitos por México de las expediciones por Yucatán, cuando llegamos a la gran biosfera de Calakmul entramos en uno de sus últimos reductos.
Kukulkán, el dios más importante del panteón maya, cuyo nombre significa Serpiente de Plumas, y precisamente sus plumas son de quetzal, se conoce en la mitología quiché con el nombre de Gucumatz. A este omnipotente dios se le veneraba mucho tiempo antes del asentamiento maya en la Península de Yucatán, y aun incluso antes de la formación de Chichén Itzá  en el siglo VI.

El libro sagrado de los mayas quichés el Popol Vuh, relata que fue Gucumatz junto Tepeu, quienes, después de varios infructuosos intentos, dieron forma al mundo donde no existía nada sino un tranquilo y apacible mar. Inventaron la Tierra y la poblaron de animales y de seres humanos. Antes de la Creación, Tepeu-Gucumatz, la dualidad sagrada, vivía enterrada en plumas de quetzal. Un cierto día el dios triple llamado Uk’ux Kaj, Corazón del Cielo, dios del Viento, las Tormentas y el Fuego, les despertó de su divino letargo con el propósito de inducirlos a realizar el acto supremo.

En el templo dedicado a Kukulkán, construido  por los mayas itzaes en las famosas ruinas mayas de Chichén-Itzá, ocurre un curioso fenómeno acústico. Se dice que en la famosa escalinata donde aparece en los equinoccios de primavera y otoño la Serpiente Emplumada descendiendo, si una persona hace palmas en la parte de enfrente de la escalinata, el sonido se propaga en el peralte de los escalones y se produce un eco distorsionado que se escucha como el suave canto del quetzal…
De aquellos quetzales que llegaron en tiempos pasados y de los cuales nos dice el Chilam Balam de Chumayel:

Llegarán a su ciudad (hace referencia a Chichén Itzá) los itzaes, llegarán plumajes, llegarán quetzales, llegará Kantenal, llegará Xekik, llegará Kukulcán. Y en pos de ellos otra vez llegarán los itzaes

Y los quetzales siguen estando presentes.

El quetzal esta en peligro de extinción por disminución del hábitat, tala indiscriminada de arboles, caza y trafico ilegal…

Este ave omnívora, casi magica,  mide entre 36 y 40 centímetros hasta donde comienza su cola, y luego esta es muy larga, y pesa entre 180 y 210 gramos. El quetzal es considerado una de las aves más bellas del mundo y la más bella de América, lo cual se debe a su característico plumaje. Sus plumas son especialmente largas en la cola, la cual les crece a lo largo de los primeros 3 años de vida y puede llegar a los 65 centímetros de largo, siendo más larga la cola de los machos que de las hembras. De hecho, su nombre proviene de la palabra quetzalli, en náhuatl, y significa “cola larga de plumas brillantes“. Sus plumas suelen ser de colores muy vivos como verdes, azulados y turquesas, violáceos, rojos (en el pecho) y reflejos dorados.

Los viajes a Mexico son sumergirte en una tierra rica en mitos y leyendas, nuestros guías locales te adentraran en esta riqueza popular durante los circuitos por México.
Los viajes a México organizados en grupos reducidos, son perfectos para descubrir lugares sorprendentes y únicos.

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